
Este artículo no tiene pretensiones políticas ni éticas (que creo son dos vertientes inseparables del problema “económico”), pues carezco de tiempo y posiblemente de formación para ello. Pero considero mi deber moral tratar de estar informada y difundir esta información por todos los medios a mi alcance. Aunque sólo llegue a una ó dos personas. Para quien quiera informarse de verdad, recomiendo acudir a fuentes rigurosas, por ejemplo asociaciones de profesionales sanitarios, como la de Madrid (AFEM), o la excelente web de Abel Novoa (exdirector general de Calidad Asistencial de Sanidad de Murcia).
Aquí dejo mi modesto resumen de algunos puntos clave: